La vida es bella

El primer punto que toque en el regreso de China fue Alemania para ver el partido entre Alemania/Italia. Un vuelo desde Beijing me llevo directo al aeropuerto de Frankfurt y desde 200 literales metros me tome el tren a dortmund con el ticket que saque virtualmente por Internet al igual que en Constitucion. El tren llego clavado y a las 5 de la tarde estaba ya palpitando el mundial. El clima era una fiesta incomparable, moria porque pierda Alemania y asi se me dio. Grite los goles casi como los de Argentina fue, fue magnifico verlos caer. Al regresar a frankfurt todo me recordo a Argentina, el tren iba increiblemente lleno, viaje de milagro estampado contra la puerta entre medio de llantos, gritos, vomitos y todo tipo de aromas ... sorprendentemente la perfeccion alemana y sus exquisitos trenes no estaban preparados para traer a la gente de vuelta.