La vida es bella

Leo en uno de los Blogs que visito frecuentemente, el subtitulado de esta foto que dice: "alguno que le diga a la abuela que mire a la cámara". Si bien puede resultar gracioso, esto me da el puntapie perfecto para compartir una reflexión acerca de la gente mayor, muy mayor como el caso de mi abuela.
Lamentablemente, en algunos casos, los abuelos entran en un mundo paralelo en donde parecería ya nada importarles, nada involucrarlos, nada afectarlos. Intentando ponerme en el lugar de mi abuela (Buba), donde su movilidad es reducida y sus sentidos visiblemente deteriorados, me cuesta encontrar un motivo para seguir adelante. Sin hacer filosofía, entiendo que muchas veces, la gente quiere seguir viva por los impulsos de felicidad que recibe, unos por la familia, otros por desarrollo humano y otros tán solo porque disfrutan leer un libro, jugar al dominó o cualquier otra cosa.
Ahora bien, qué pasa con aquellos que están totalmente incapacitados de conectarse con el mundo exterior? Aquellos abuelos que no tienen una enfermedad profunda pero que el deterioro de la naturaleza misma, los hace alejarse día a día ... Me resulta muy difícil encontrar un motivo por el cual quieran seguir luchando ... ya grandes, cansados, sintiendo que ya cumplieron con lo suyo y viven un aislamiento que poco a poco se profundiza.